lunes, 5 de septiembre de 2011

11)- El Sargento Vicente o la Búsqueda del Propio Sentido



NOTA PREVIA: Si no entiende usted un pepino respecto a qué va ésto del Baúl, ni del entorno de aDitoday, ver documento Breve introducción a los “Eventos”, y a la evolución de “Las Criaturas del Baúl”, http://elbauldebandolera.blogspot.com/2011/08/introduccion-los-eventos-y-la-evolucion.html, o en su defecto el texto del primer personaje, “Joselito, el Niño de la Guasa, o la Fuerza de la Necesidad”.

En todo caso, conviene recordar que ninguna en de estas criaturas se busca “per se” un valor literario en especial. Se trata de otra cosa.... De algo para ser, sencillamente, vivido.



Ya sé que los asuntos del devenir jamás pueden afirmarse, pero las postreras reacciones de las criaturas a mi patética situación emocional en las últimas dos semanas han resultado ser tan increíblemente sorprendentes, contundentes y manifiestas, que deduzco por ellas que ya debo haber tocado fondo en mi propio desconsuelo....

Toco de paso madera, y prosigo.

Recordaréis, espero, las risitas del Baúl, los resplandores nocturnos, los extraños cambios espontáneos en los atrezzos y, sobre todo, la melancolía y soledad que me invaden al sentir que "ellos" empiezan a escribir su propio destino, sin contar conmigo en lo más mínimo.

La aleación resultante entre esta evolución in crescendo y un estrés laboral objetivo forjó su previsible resultado: servidora estaba completamente derrotada.

Como consecuencia directa del desastre, ya no me importaba el Baúl, ya no ponía la manta, ya no me inquietaban las risas, ya me daba igual si Fulano llevaba un nuevo sombrero a lo Rococó o si Mengano aprendía a cantar ópera china... En resumidas cuentas: realizaba mis tareas básicas de rutina con mirada opaca, daba las buenas noches, y punto.

Mi absoluta y triste rendición a la evidencia de mi incompetencia vital debió sacudir algo grave en las reuniones clandestinas del Baúl... Tan grave, que las criaturas han dado un giro inesperado (¿Y continuado, me pregunto?) a esta pequeña e inacabable historia.

Por lo menos, esa ha sido mi dantesca conclusión frente a los siguientes sucesos:

Hace unos días, apenas aporreé el despertador impenitente, "alguien" había depositado un flamante desayuno continental completo en la mesilla. Aunque nunca desayuno, me lo tomé obediente, para dar gasolina a mi pensamiento y no sucumbir, mientras masticaba, al pánico escénico que estaba a punto de desencadenarse.

En días subsiguientes, una fragante rosa adornaba el baño, en el salón apareció un impecable nuevo libro de Don Miguel de Unamuno, los botines estaban recién cepillados, el lavavajillas a punto, la mesa del estudio impoluta, el teclado del ordenador resplandeciente, y hasta apareció una agenda perdida tiempo ha... Por último, una caja de bombones en la cocina portaba una tarjeta escrita en "Arial":"El Baúl te echa de menos. No estés triste. Vuelve con nosotros".

En síntesis, dejando aparte el estupor y sin dramatismos añadidos, deduzco que son capaces de sentir compasión infinita... Por lo menos en lo que a mí (su supuesta creadora) respecta.

Siendo objetiva y racional, debería determinar (¡Lo sé, de verdad!) que, en realidad, el fenómeno ha empeorado notablemente con estos acontecimientos, pero qué queréis que os diga: las sorpresas han sido tan inconcebibles como gratas, y aunque servidora siga yendo de cráneo, la tensión emocional ha bajado muchos puntos con este acercamiento tan filial.

Así que aquí me tenéis, creyendo que he ganado la batalla por puro romanticismo, y sin pensar en que la guerra puede seguir en cualquier momento. Pues la situación, en el fondo, sigue siendo la misma... ¿Quién manipula a quién??

Para rematar el caramelo, os diré que Vicente se ha presentado directamente voluntario a la palestra, candidatura avalada además por una votación sindical previa del todo pacífica y ordenada en el Baúl. Dice que, además de protegerme un rato, le vendrá muy bien charlar con alguien, y nadie mejor que Vicente para dar rienda suelta a una cháchara terapéutica... Sorprendente actitud, es una monada, de verdad.

Así que... ¡Señoras y Señores, con todos ustedes el sargento más original de la Benemérita, el más patriota, el más solitario, sociable y charlatán!
¡El sargento Guardia Civil Vicente, y su afición por la gente!
¡Arriba telón, venga ese Himno!


PERSONAJE: EL SARGENTO GUARDIA CIVIL VICENTE
DISFRAZ:
Sombrero de tricornio, capa negra, bigote pequeño, guantes blancos, escopeta (mejor si es fusil,pero dificil), porra al cinto, esposas al cinto.
COMPLEMENTOS: Un diccionario, un cactus del desierto (el de siempre).
TEMA MUSICAL: Himno de la Guardia Civil (Coro de La Benemérita)

http://youtu.be/zHH3Ul9jazI


TEXTO BASE GUARDIA CIVIL VICENTE:
(Acompañando al Himno, Vicente entra en escena levantando la mano)
¡¡Alto, ciudadanos!!
¡Saludos! ... ¡Y al suelo todos!

(Saluda a la guisa militar y empuña su escopeta).
Os habéis topado, así a lo tonto, con la Benemérita, oséase, con la autoridad pertinente, asistente y competente.

(Levantando el dedo)
Me explico: pertinente para solicitar la documentación ahora mismo, asistente para mantener el orden público como debe, y competente para juzgar si es necesario el calabozo, propiamente, para quien resulte excesivamente impertinente.

Vaya el tema por delante, y que quede bien claro....

(Se apoya en la escopeta y suaviza el tono con animación)
Por lo demás, mi inefable ojo clínico es capaz de juzgar inmediatamente la catadura de la fauna.


Por ejemplo, y para que quede patente (Va señalando): el torerito parece valiente; el mosquetero, elocuente; el sacerdote, coherente; el del antifaz, clemente; el del Oeste, paciente; el del camello, estridente; el convicto, inteligente; el profesor, un vidente; la pilingui, diligente; y la viudita, imponente, aunque muy poco decente (*).
(*)- Variable en función del Evento y los participantes. En este caso, todos los que han sido publicados hasta ahora en aDitoday.

Menda mismo es... diferente, además de consistente. Y para más señas, a la vista está, da ambiente...

Por cierto, servidor y autoridad se llama Vicente, experto en clichar a la gente (Se lleva el dedo al ojo), lo cual no deja de tener su interés, y su aliciente.
¡Je, je, je....!


(Deja de apoyarse en el fusil, sigue su tono animado)
Cambiando de tema, está claro que últimamente los fondos no llegan al Cuerpo, y ahora en vez de parejas, patrullamos en solitario. O sea, que no hay con quien platicar... Salvo con el cactus este, poco pródigo en interacciones (Señala al famoso cactus del desierto).


Así que, para suplir el aburrimiento de la perpetua inacción, de las palabras, con tesón, ensayo su dicción (Muestra al público su diccionario) ¡Je, je, je! ...

Osease y resumiendo, que gracias al desierto de la crisis, soy el sargento más culto de la Benemérita. (Hincha el pecho).

¡¡Pero ojo!! ¡¡Ojoooo!! ¡No nos confundamos...!
(Levanta otra vez el dedo y señala al público).


¡Que al primer insurgente que viole la normativa vigente, le abro un cacho expediente para que quede patente su condición disidente...! ¡Que para eso uno es patriota¡ ¡¡Y agente!!

Eso sí, aunque culto, sargento y patriota, servidor también es más pobre que las ratas.... Que aunque el honor es mi divisa, podríamos decir que en el mercado está bastante devaluada.

Y es que ni llegan los fondos al Cuerpo, ni llega el lote por Navidad, ni llega la gratificación por años de servicio, y por no llegar no llegan ni los uniformes... (Con tono de profundo hastío, levantando el brazo) ¡Y ya sólo escribo informes y solicitudes enormes, y colecciono conformes en cartapacios deformes!

Mientras tanto, aparte de estudiar el diccionario, me estoy pensando pasarme a tráfico, que al menos cobran por comisión de multas..

(Cambio de tono repentino, espalda erguida, hincha pecho, coge el fusil)
¡En fin! ¡A ver! ¡Todo el mundo firme!

Que de tanto hablar, aquí no ha presentado la documentación ni una mosca...
¡Venga, todos conmigo al cuartelillo, por silencio sospechoso!!
¡El cactus también!

¡Y todo por la Patria!

(Sube la música, levanta fusil, sale saludando de nuevo a la guisa militar).

Originalmente publicado en: http://www.adi-today.es/columnas/134-el-sargento-vicente-o-la-busqueda-del-propio-sentido?catid=38%3Abandolera-teatro-familiar-desde-barcelona

4 comentarios:

  1. Este Vicente excelente, me recuerda vagamente, al Saza, que era teniente, en Amanece... por poniente". Me gusta mucho y me gusta poder decirlo sin tener que pinchar en un icono con el pulgar levantado. En los once personajes que has sacado del baúl y de algunos que más parece que han salido casi por sus bemoles (como éste, por ejemplo), no sé qué me gusta más: si los monólogos o las introducciones que les -y nos- regalas. Excelentes, ya lo dije, como el teniente Vicente. Eso sí, más que escopeta (término que suele denotar a armas de caza -de animales, no de personas-, quizá fusil. (o subfusil, que es lo creo que llevan ahora, cuando no pistola).

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  2. Janial, amigo: éste es el que te decía que te iba a gustar. Cuando llegue al Club, ya lo habrás visto. ;) Vas con ventaja…. Os veo platicando tan ricamente, sin duda alguna, a ti y a Vicente. Y conste que ha sido interpretado tres veces. GRACIAS, por tu atención, y por prestar atención (valga la redundancia) a las introducciones del Baúl. Espero hacer algo con ello algún día.
    Tomo nota de la escopeta y lo cambio de inmediato (es que como el atrezzo era una escopeta, y una no sabe de esas cosas...).
    GRACIAS.

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  3. "Espero hacer algo con ello algún día". ¿Pues editarlos, qué si no?

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  4. No, no.... Base de novela.
    http://elbauldebandolera.blogspot.com/2011/08/introduccion-los-eventos-y-la-evolucion.html

    Veremos....

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