Perdidos
desencuentros
no
pueden colmar
toda
una vida.
-Esas
grandes lagunas
que
desangelan mi pecho-
Ha
llegado roca
a
mis entrañas
desgajadas.
-Duelen-
Dolerse
y no sentir,
extraña
paradoja
sin
deshielo.
-Ya
no puedo-
Y
sin embargo,
Madre,
jamás
comprenderás lo suficiente
la
lluvia que derramaré
Me chirría un poco, solo un poco,lo de "ha llegado roca". Quizá porque aquí, roca es marca de sanitarios, no sé. La lluvia-lágrimas, una preciosidad. Y, como siempre, tu marca de fábrica. Tus guiones o apartes dentro del poema.
ResponderEliminarAy!! Qué manía en volver a comentar!! No sé si te llega si doy a "responder". Un beso, comentario más abajo.
Eliminar:) Te esperaba, sabía que dirías lo de la marca de la casa.... En un principio era "Ahora mismo hay roca en mis entrañas", pero tanto da... ROCA: no sentir nada.... Debe ser la roca de Roque. ;)
ResponderEliminarAh!! Lluvia-deshielo....
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